Skip to main content

¿Qué es el quiet quitting o renuncia silenciosa?

quiet quiting o renuncia silenciosa

El concepto quiet quiting o renuncia silenciosa, es un término que viene resonando con mucha fuerza en los últimos meses. Pero esta tendencia lleva años fraguándose de forma inadvertida. 

¿Pero qué es el quiet quitting? La renuncia silenciosa consiste en que los empleados hagan única y exclusivamente las tareas que están estrictamente definidas en su contrato. Es decir, estos empleados hacen su trabajo, pero no van más allá, no se presentan voluntarios para hacer tareas extras y no asumen funciones por las que no se les paga.

Este comportamiento no es ilegal, hacen su trabajo, pero no se involucran en la empresa, ni en los objetivos, ni en propuestas de mejora de la productividad o los procesos, ni hacen horas extras, ningún esfuerzo extra.

En resumidas cuentas, este comportamiento establece límites con la empresa.

Para definir mejor este concepto, estas serían algunas de las acciones que pueden definirse dentro de la renuncia silenciosa:

  • No hacer tareas que estén fuera de la descripción de la hoja de trabajo.
  • No responder correos electrónicos o mensajes fuera del horario de trabajo.
  • Salir del trabajo a la hora indicada.
  • Estar menos involucrado emocionalmente. Es decir, no participar en actividades con los compañeros o actividades extra de la empresa.
  • No hacer esfuerzos para superar las expectativas de los empleadores.
  • Interés reducido en ir más allá para asegurar una promoción en la empresa.

¿Afecta igual la renuncia silenciosa a todos los empleados?

No todos reaccionamos igual frente a la misma situación y el quiet quitting no es una excepción. Pero esta tendencia parece afectar especialmente a los miembros de la generación Z. Estos jóvenes tienden a estar más educados que las generaciones anteriores, muchos no han trabajado hasta graduarse y han crecido durante una crisis económica severa, y una pandemia, lo que los hace poco propensos a mostrarse entusiastas al trabajar extra regularmente. A diferencia de los boomers y los milenials que fueron educados para pensar que con esfuerzo y trabajo duro podrían alcanzar estabilidad profesional y personal, esta generación está más centrada en vivir el presente. 

Aun así, también hay que resaltar, que empleados que una vez fueron extremadamente comprometidos y entregados con la empresa, también pueden sentirse desencantados y reducir su entrega, así unirse a la ola de la renuncia silenciosa.

Si tienes una cuenta en TikTok, la red social favorita de la generación Z, podrás ver que este tópico está en auge con miles de videos con el hashtag #quietquitting. 

¿Cuáles son las razones por las que los empleados solo hacen lo estrictamente establecido en su definición del empleo? 

Esta propensión quizás ha pasado desapercibida hasta ahora, al fin y al cabo, las causas por las que algunos empleados tienen esta desafectación pueden ser muy personales:

  • Agotamiento laboral: si además de hacer el trabajo establecido, la norma es que siempre hay que intentar sobresalir, proponer proyectos, liderar mejoras; puede resultar agotador para el trabajador, lo que puede desembocar en fatiga laboral, estrés, y problemas de salud.
  • La falta de un balance entre la vida laboral y la personal: en que la vida laboral invade la personal, y en que se tienden a poner los intereses de la empresa por delante de los personales, también puede resultar en frustración e insatisfacción.
  • La visión de que el salario es bajo y que no se corresponde con el esfuerzo y compromiso que el empleado entrega a la empresa es otra causa de desencanto. 
  • La percepción de que los gerentes no expresan apreciación por el trabajo y rendimiento de los empleados.

¿Cómo pueden las empresas disminuir la renuncia silenciosa? 

En resumen, parece que las causas más comunes por las que los empleados inician una renuncia silenciosa son el balance de la vida laboral y personal, los salarios bajos, la falta de oportunidades de ascenso, el trato que reciben en la empresa y sentirse poco respetados. Suena terriblemente negativo, pero las empresas pueden anticiparse y evitar estos sentimientos. 

  1. El primer punto y más importante es escuchar a los empleados. Cada uno tendrá razones diferentes para no estar comprometido al 100%, por lo que no hay una solución que valga para todos. Hay que escuchar las peculiaridades de cada uno y adaptarse. El departamento de recursos humanos debería liderar esta iniciativa y así prevenir esta situación.
  2. Planifica el trabajo y adjudica los recursos de forma eficiente: si las emergencias son la norma y los empleados tienen que hacer horas extras de forma regular, no se trata de una eventualidad sino de mala planificación, que los empleados acaban solucionando con un esfuerzo extra constante. Hay que evaluar la necesidad de contratar más empleados o tener una clara política de remuneración para las horas extras.
  3. Salarios apropiados: Es vital asegurarse de que los salarios de sus empleados estén a la par con las tasas de mercado, el coste de vida y las cargas de trabajo actuales. La compensación debe revisarse al menos una vez al año, y los gerentes también pueden proporcionar reconocimiento, ventajas y beneficios no monetarios. Otra recomendación es tener un plan de progresión profesional, en que marca el ascenso salarial acorde al progreso del empleado en el rol y la empresa.
  4. Facilitar la reconciliación laboral y familiar: jornadas flexibles respecto al horario, reducción de jornadas, compaginar estudios y trabajo…
  5. Respetar el tiempo de los empleados: cuando se acaba la jornada laboral, nadie debería recibir llamadas del trabajo. Respetar la separación de lo personal y lo laboral es imperativo.
  6. Ser transparente sobre la proyección de cada empleado en la empresa. Prometer ascensos y subidas salariales que nunca se materializarán son causa de gran insatisfacción. 
  7. Usa estrategias para reconocer las contribuciones de los miembros del equipo.
  8. Apoyar que los empleados se tomen vacaciones y descansos. Es importante alentar a los empleados a tomar descanso para descansar y desconectar.

Reducir la marea de renuncias silenciosas es un objetivo relevante de cualquier empresa, todos se benefician tanto empleados y como empleadores. Cuando los empleados están satisfechos, se sienten escuchados y respetados, incrementan su compromiso y eficiencia, lo que a su vez incrementa la productividad.